03 de del 2013
Conferencia
Leonardo Taquino,
integrante de República Rasti, contó para los
asistentes sus experiencias como padre y la
evolución que vio de su hijo y de la relación
entre ambos a partir de compartir el juego con
Rasti.
La disertación de la psicóloga Daniela Viera hizo
reflexionar a padres y adultos sobre la
importancia de jugar junto a los niños para
desarrollar la creatividad,
la enseñanza y fortalecer el vínculo entre
padres e hijos.
Participaron también integrantes de República Rasti,
algunos de los cuales expusieron sus creaciones
que atraparon las miradas y fotos de los
asistentes.
El
evento fue organizado por alumnos de los últimos
años de la tecnicatura de Organización de
Eventos del Centro de Organización de Eventos (COE)
Resumen de la exposición de la psicóloga Daniela Viera:
¿Qué se juega cuándo un niño juega?
¿Qué se juega en el niño?
- Se juega el modo en que incorpora el mundo y el modo en que se incluye en él.
- Se juega la maduración, el crecimiento y el desarrollo del pensamiento.
Observando cómo juega un niño podemos
entender su modo de pensar. (Juego
exploratorio, juego solitario, juego
representativo, juego con otros, juego
como recurso para el aprendizaje).
- Se juega la constitución psíquica.
Jugando se diferencia del otro.
Definiendo qué lugar ocupa para sí mismo
y para los demás.
- Se juega la elaboración de situaciones.
Siendo el juego la forma del decir en
la infancia, a través de él hace activo
lo que sufre pasivamente en la vida.
Repitiendo inscribe aquello que le
resulta intolerable.
- Se juega la realización de los deseos.
El deseo dominante de ser grande y ser
como los mayores. Ocupando el lugar del
otro, sin riesgo porque está con el
otro. Representándolo, conservándolo,
identificándose con el adulto de quien
todavía depende.
¿Qué se juega en el adulto?
- Se juega una función primordial que este tiene, que es generar espacios para que el juego tenga lugar. Brindando, dentro de sus posibilidades, tiempos y espacios. Revalorizando el ocio,
palabra tan vapuleada en una época
donde se la asocia a la holgazanería,
donde el estar ocupado, aún en los
niños, es la necesidad imperante,
sobrecargándolos de actividades.
- Se
juega su concepción de juego, la
transmisión, soporte de aspectos
identificatorios. La identidad que es
la vida que vivió, lo que recuerda
y como la recuerda para contarla o
jugarla.
- Se juegan miradas retrospectivas,
reminiscentes en las que se incluye la
trascendencia y sus diversas
posibilidades de transmisión a otras
generaciones.
- Se juega la generatividad, la
continuidad con los nuevos matices que
le den las nuevas generaciones.
Posibilidad que se genere un desvío
creativo al servicio de las
generaciones venideras.
- Se juega el ofertar
objetos tangibles como opción a la
prevalencia de la virtualidad.
La
propuesta al juego nos lleva, al recuerdo
de la infancia y las nociones necesarias
para adentrarse en este mundo infantil. La
aparición de un mundo donde no hay nada
preestablecido, donde todo puede tomar una
nueva forma.
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Por Fiorella Carnir
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